martes, 10 de mayo de 2011

¿Quién me dibujó ahí sentada por el resto de mi vida?


"Nunca sé despedirme de ti, siempre me quedo
con el frío de alguna palabra que no he dicho,
con un malentendido que temer,
ese hueco de torpe inexistencia
que a veces, gota a gota, se convierte
en desesperación.
Nunca se despedirme de ti, porque no soy
el viajero que cruza por la gente,
el que va de aeropuerto en aeropuerto
o el que mira los coches, en dirección contraria,
corriendo a la ciudad
en la que acabas de quedarte.
Nunca sé despedirme, porque soy
un ciego que tantea por el túnel
de tu mano y tus labios cuando dicen adiós,
un ciego que tropieza con los malentendidos
y con esas palabras
que no saben pronunciar.
Extrañado de amor,
nunca puedo alejarme de todo lo que eres.
En un hueco de torpe inexistencia,
me voy de mí
camino a la nada."

23 comentarios:

eMiLiA dijo...

"Problemas de geografía personal" de Luis García Montero.


.:.


"Se va, se va como la vida, se va... y no vuelve más."


.


Perdiendo trenes, aviones, buses y TIEMPO.

Panic dijo...

Demasiado me ha llegado esto en un día como el de hoy...

mflorencia dijo...

qué puntería para escoger textos!

mi abrazo.

Noelia Palma dijo...

y lamentablemente, los ciegos se acostumbran, se resignan y se re-conocen nuevamente, se reaprenden, no?

besotes, Emilia, que estés bien!

Anónimo dijo...

Vengo a leerte, como siempre, a dejarte un poco de ánimo para que sigas con tu producción y a abrazar tu poesía.
Un abrazo.

Etienne dijo...

No saber hacia donde va el amor, ser ciego en la oscuridad, tropezar con tu corazón y no poder asirlo, vivir en el ayer pensando el mañana, diciendo palabras que se sueñan y soñando abrazos vacíos.
Espero que no sea así el resto de mi vida...

josé ángel dijo...

Buenas, lindas palabras...después de un encuentro con el ser amado es común un desencuentro con uno mismo...y esa duda de saber si nos granjeamos un hueco en su corazón...si estuve a la altura de lo que yo esperaba de mi. Interpretamos las sonrisas, y a veces maquillamos sus palabras para hacerlas nuestras, y nos convencemos de que volverá.

salud y un mapa con el itinerario
a seguir...luis garcia montero es un buen atajo.

Noelplebeyo dijo...

todo sirve para algo...y si pasa de largo...habrá otra parada

DINOBAT dijo...

Los recuerdos son mentiras...

Lila Biscia dijo...

...

y qué te puedo decir...?

bellísimo
y
terrible.

emilia...
en fin.


besos!

Gustavo Pettini dijo...

Atención con los ojos que miran de
otra vez.
Cambiémonos la ropa,
la soledad, el ala, la mancusa,
el miedo que transpira.
La estructura más complicada tiene
agujeros de libertad, suspenden
rayos divinos y terrestres:
se quieren ver.
Nadie sabe qué cantan
en su universo de órganos recién
nacidos, niños bajo
las tempestades de febrero.
Los giros del instante se van a una piedra lejana.
------------------Privaciones- Juan Gelman

Que bueno es abrir un nuevo libro, caminar por la calle, tomarse unos segundos frente a el, oler las hojas, las palabras, perderse en versos y rimas, extrañar, sentirse libre, así como dice el título del que llevo entre mis cosas, el emperrado corazón que amora-

Un beso grande. [Gustavo]

Alejo Z. dijo...

Cuando la distancia se alarga sin billete de retorno por la torpe existencia de un adiós, suele ser una putada.
Un abrazo,
Alejo

Anónimo dijo...

Como te entiendo amiga mía...

Humberto Dib dijo...

Hola, Emilia, llegué hasta aquí a través de otro blog amigo, realmente me gustó mucho, voy a quedarme como seguidor.
Algunos se quejan de que utilizo un discurso parecido en cada blog que visito, pero, con sinceridad, cuando estoy de recorrida, se me hace difícil inventar una presentación personal para cada uno. Te aseguro que leo cada uno de los blogs a los que entro.
Sea como fuere, si tienes ganas, te invito a pasar por mi espacio.
Un saludo desde Argentina.
Humberto.

www.humbertodib.blogspot.com

Esilleviana dijo...

Pasa el tiempo y suspiro porque paso,
aunque yo quede en mí, que sabe y cuenta,
y no con el reloj, su marcha lenta
nunca es la mía bajo el cielo raso.
Ay, Dios mío, me sé mortal de veras.
Pero mortalidad no es el instante
que al fin me privará de mi corriente.
Estas horas no son las postrimeras,
y mientras haya vida por delante,
serás mis sucesiones de viviente.

Jorge Guillén

Pero me gusta esa no despedida, es un hasta la vista a pesar de la ceguera. Es un párrafo ejemplar,donde el camino de la nada es un hueco torpe, que tal vez nos podemos encontrar uno mismo... de veras Emilia, me encantó el poema de García Montero.

un abrazo

efa dijo...

Fiuuu, me dio cerca, yo tampoco se despedirme!
No sé q más agregar.
Salud!

Espérame en Siberia dijo...

¡No, mi niña! Nada de perder el tiempo por alguien que no lo vale.

El poema me pareció hermoso, pero melancólico. Siempre tan agridulce esto de amar, ¿verdad?

Te quiero, Emilia.

Nómada planetario dijo...

Hay cegueras naturales y otras selectivas, estás últimas son las peores con diferencia.
Un abrazo.

La sonrisa de Hiperion dijo...

Hay días que caminamos a la nada. Otros a la plenitud.

Saludos y un abrazo.

Esilleviana dijo...

creo que google se comió mi comentario jajaja.

un abrazo amiga.

Carlos dijo...

"Me voy de mí, camino a la nada"...

Clap, clap, fabulosos esos versos...
Y bueno Emilia, qué te puedo escribir, que los buses pasan, que todo pasa, sólo el tiempo no vuelve, no vuelve realmente.

¡Abrazo de domingo tucumano!

Dayán Lorank dijo...

Ay! ¡Ese sentimiento se me hace conocido! =/

Buen inicio de semana =)

Augusto dijo...

A mi también me pasa eso... La pelea termina cuando tiene que terminar, la vida sigue adonde tiene que seguir.