viernes, 29 de mayo de 2009

auto convencimiento

no necesito verte más
al menos
hoy

martes, 26 de mayo de 2009

Cry














I wanna cry, why?
I don't know why
maybe I'm sick
but I feel fine.
I wanna cry
but I don't know the reason why
I wanna cry, why?
I don't know why.

I wanna cry, why?
I don't know why
maybe it's you
could I be the one.
I wanna cry
but you are not the reason why.
I wanna cry, why?
I don't know why.

Sometimes you lose the reason to be alive
sometimes you could be a cloud flying in the sky
sometimes you need tears wetting your eyes
sometimes you feel that you just wanna cry.

I wanna cry, why?
I don't know why.
I wanna cry, If you don't mind.
I wanna cry, it doesn't matter why.
I wanna cry, for you, for us.
I wanna cry because I'm alive



sábado, 23 de mayo de 2009

NOCTURNO

.:.
Frescor de los vidrios al apoyar la frente en la ventana.
Luces trasnochadas que al apagarse nos dejan todavía más solos.
Telaraña que los alambres tejen sobre las azoteas.
Trote hueco de los jamelgos que pasan y nos emocionan sin razón.
¿A qué nos hace recordar el aullido de los gatos en celo,
y cuál será la intención de los papeles
que se arrastran en los patios vacíos?
Hora en que los muebles viejos aprovechan para sacarse las mentiras,
y en que las cañerías tienen gritos estrangulados,
como si se asfixiaran dentro de las paredes.
A veces se piensa,
al dar vuelta la llave de la electricidad,
en el espanto que sentirán las sombras,
y quisiéramos avisarles
para que tuvieran tiempo de acurrucarse en los rincones.
Y a veces las cruces de los postes telefónicos,
sobre las azoteas,
tienen algo de siniestro
y uno quisiera rozarse a las paredes,
como un gato o como un ladrón.
Noches en las que desearíamos
que nos pasaran la mano por el lomo,
y en las que súbitamente se comprende
que no hay ternura comparable
a la de acariciar algo que duerme.
[Oliverio Girondo]

miércoles, 20 de mayo de 2009

El breve amor

.:.
El ansia a borbotones.
Algo se está cocinando en este
pecho y ese vaho de suspiros quisiera
silbar otras verdades.
¿Te vas? Ah, ya te fuiste. Y
yo con este plato de injurias
a medio servir.
.:.

domingo, 17 de mayo de 2009

Hasta siempre don Mario!


La nieta de don Mario sabe que ya es grande para sentarse sobre sus rodillas (grande ella con su posgrado en desconsuelo, grande él con los achaques de la muerte) pero la joven está triste y busca en las palabras del abuelo el pañuelo de rigor.
Él fue quien le dijo que existía para ella alguien que sería la respuesta a la pregunta que nunca había formulado, él le prometió que cuando menos lo esperara la alegría tiraría piedritas en su ventana, él le avisó que en sus tardes plagadas del tedio de oficina, llegaría aquel a quebrar la monotonía sonora de las teclas que calculaban intereses.
Es la esperanza versificada la que la impulsa a entrar en la luminosa habitación. Se acerca en silencio a la silla que mece el sueño de su abuelo y a cada paso se desmigajan los recuerdos (d)escritos. Próxima a quebrar esa pequeña muerte, se pregunta por qué ha creído en cada una de sus palabras, y se sonríe al rememorar aquel verso del anciano: “pero tampoco creas a pie juntillas todo”. - Mea culpa -, susurra y toca el hombro para despertarlo.
- Abuelo, abuelo…
- Mmm… ¿si…?
- Me siento sola, abuelo, y vos una vez me dijiste que la soledad también podía ser una llama. Pero no lo es para mí. No hay llamas, sólo la soledad desolada, la del rostro infame con los ojos cerrados. Abuelo, no he visto ni una llama…
- ¿No has visto la llama? Sabes que a fin de cuentas no importa. Debes aprender a dibujar tu propia soledad. Descríbela para mí.
- ¿Mi soledad? Mi soledad es un grito helado, una mano asida a mi garganta. Mi soledad me quiere dar muerte, yo lo sé. Y me persigue cada noche en los zócalos de mis pesadillas. Es un perseguidor constante, incansable. Temo nunca poder liberarme, abuelo.
El anciano abrió levemente los ojos, la miró un largo instante y sólo pronunció un demudado temblor: - ¿Qué he hecho con vos?, ¿en qué te han convertido mis poemas?
La nieta de don Mario posa entonces su mano en los suaves cabellos de su abuelo, la caricia se prolonga tenue y se derrama dócilmente, casi con parsimoniosa calma hasta convertirse en un mero gesto de perdón.


[Mario Benedetti falleció hoy domingo 17 de mayo en Montevideo a los 88 años]

viernes, 15 de mayo de 2009

Quizás porque no soy un buen poeta...


"Ya ves, a veces me canso de mí, de no tener, valor para buscarte y cometer todo delito que este amor exija: Quiet(o) ahí, tus labios o la vida."
Ismael Serrano.


.:.





Labios. Roce de labios. Aliento. Los dragones también tenemos derecho a amar.
Es temprano, el sol ni siquiera amanece. Perdonémonos los besos de sábanas.
Juguemos a los cíclopes. Juguemos a que me querés y te quedás. Mirame así, bien de cerca, confundamos nuestros ojos.
Mareémonos con bruscos giros. Pero sin caernos, ahí ¡CUIDADO!, ahí está la frontera de la cama y un poco más acá, ¿no lo ves? la frontera de mi cuerpo.
Sí, sé bien que la geografía nunca fue nuestro fuerte. Hoy es un buen día para organizar temerarias expediciones en esta patria ganada.
No estoy muy segura de lo que digo. ¿Lo digo o sólo lo estoy pensando? Tu rostro me muestra un eco de dudas... ¡Grité la muda confesión!
Yo apenas quiero ser ese centímetro de silencio entre tus manos y mis manos. La sonrisa que ahuyenta tristezas entre tus ojos y mis ojos.


Nada más quiero dejar de ser tan cobarde. Esa militancia ya no me es suficiente.
No me tapes, no tengo frío. Es por temor que tiemblo.
Estás entendiendo. Es la malacostumbre de la soledad. El saber con precisión de anatomista la cantidad de arroz que hay que hervir (media taza) para preparar la cena, o lo que dura un cartón de leche en la heladera antes que el moho del olvido lo consuma.
Los zócalos que me gritan las ausencias, son los mismos en los que me reflejo en mis tardes de cucaracha. Pero eso no te lo digo. Eso me lo callo.

Vos te enamoraste de este yo-pez, este yo-pájaro, este yo-mariposa. Nunca deberás acceder a este silencio. Jamás te enterarás que me metamorfoseo en insectos pérfidos e inmortales.
Dejame girar hacia tus brazos otra vez. El cielorraso metafísico me está desquiciando.
Te miro. Un ojo está espiando mis mañas, mientras el otro se esconde en la espesura de la almohada. Vos me ves tan simple. Vos me hacés tan simple.
Lo acepto, transformame a tu imagen y semejanza.
¡Ay esta mamushka! ¡Ay esta caja china que se creyó impenetrable!
No sé cómo lo hiciste, pero aceptaste este enredo de letras en tu vida. Me viste llegar cargada de libros y fracasos y me abriste la puerta doble cancel para evitar perder así todos mis petates en el atropello del abrazo.
Tu espíritu de incendiario quemó esa única nave que me anclaba al pasado.
Me liberaste.
No te duermas. Te quiero despierto y mío. ¿Te vas a quedar?
La penúltima canción ya está sonando y quiebra mi soliloquio.
¿Bailamos?







lunes, 11 de mayo de 2009

Préstamo



"me prestaste un beso,
me prestaste calma,
me prestaste todo lo que
me faltaba..."

sábado, 9 de mayo de 2009

Greta




Se llamaba Greta como la famosa actriz
ni tan rubia ni tan suelta ni tan frágil
ni tan falta de complejo ni tan llena de carmín

se llamaba Greta y era joven y feliz
esperando la llegada de algún tren en la parada
confundida
sin saber que las heridas
son el precio de vivir

y llegaste tú con tu bicicleta
y tu estrecha camiseta
a volarle el corazón
y llegaste tú pura dinamita
con disfraz de agua bendita
a volarle el corazón

se llamaba Greta y aprendió como la actriz
a llorar por las esquinas y después como si nada
a decir agua pasada
estoy curada
la estrategia de mentir

se marchó el ladrón con su bicicleta
y sin flores para Greta
que esperaba en el balcón
pero ya no hay más ya no siente nada
ya olvidó aquella jugada
ya pasó lo que pasó

se llamaba Greta y era joven y aprendiz
le quedaron cicatrices de los días infelices
engreído malnacido
consentido
ya no piensa más en ti

ahora espera el tren o quizá la bicicleta
o los ojos de otro atleta
como no se encuentran dos
y vendrá tal vez y será un especialista
y sabrá como un artista
consolarle el corazón...
[Pedro Guerra]

miércoles, 6 de mayo de 2009

Arrullo de mamá


Canción del jacarandá

Al este y al oeste
llueve y lloverá
una flor y otra flor celeste
del jacarandá.

La vieja está en la cueva
pero ya saldrá
para ver qué bonito nieva
del jacarandá.

Se ríen las ardillas,
ja jará jajá,
porque el viento le hace cosquillas
al jacarandá.

El cielo en la vereda
dibujado está
con espuma y papel de seda
del jacarandá.

El viento como un brujo
vino por acá:
con su cola barrió el dibujo
del jacarandá.

Si pasa por la escuela,
los chicos, quizá,
se pondrán una escarapela
del jacarandá.
.:.
[María Elena Walsh]

lunes, 4 de mayo de 2009

Manual de instrucciones (Tomo II)


El amor se abrió paso entre los ripios de los caminos, por sobre los murmullos de las hojas que ululaban querencias lejanas, por sobre los cuerpos compañeros curtidos de soledades, por sobre sus luchas y su cansancio.
El amor se manifestó, deslizando su frágil mano en la secreta aspereza de su piel...






INSTRUCCIONES PARA ENAMORARSE
Elija una mujer cualquiera. Ponga cuidado en alguna parte de su cuerpo (de ella) y empiece a amarla. Aumente poco a poco su amor hasta completarla. Hecho esto, desenamórese rápidamente, ya que el amor provoca adicción
.::.
INSTRUCCIONES PARA MEDIR LOS AMORES
Encienda la pipa y siga caminando. Recoja, con cuidado, algunos de los besos más olvidados, algunos mechones de cabello, dos o tres miradas, uno que otro recuerdo de pieles blancas y morenas, un poema roto y una suela de zapato (esta última para darle consistencia al brebaje). Revuelva todo y sazone a discreción. Divida el resultado entre dos, tantas veces como sea necesario, hasta que no quede nada
.::.
INSTRUCCIONES PARA MEDIR DESAMORES
Basta el rencor y, finalmente, no vale la pena...

[Subcomandante Marcos - Selva Lacandona Chiapas, México, 1984-1989.]

viernes, 1 de mayo de 2009




Hoy quiero un beso hollywoodense